Cómo cuidar del piercing de pezón para asegurar una buena curación

Foto Flickr (copyright galería Das Pedro)

El piercing del pezón es considerado una de las perforaciones más eróticas y sensuales que se pueden realizar en el cuerpo.

Se realiza de forma rápida y fácil, y los diferentes estilos de la joyería que hay en el mercado hacen posible cambiar el estilo y la apariencia de la perforación una vez que se haya curado por completo.

Si deseas perforar tu pezón, tendrás que realizar unos cuidados posteriores muy importantes para asegurar una buena sanación y que esta sea lo más rápida y cómoda posible.

¿Puedo cambiar yo mismo/a las joyas cuando me realice el piercing?

Es recomendable que no, aunque mucha gente lo hace. Eso es decisión tuya y de tu bolsillo. Generalmente, los anilladores de un estudio de tatuajes no tienen inconveniente en cambiar la joyería cuando el piercing inicial ha curado, incluso ni te cobran por hacerlo.

Lo que puedes hacer es comprar el piercing que vas a cambiar en ese mismo estudio, ya que poseen un amplio catálogo de joyas con las que seguro quedarás encantado. Por eso mi recomendación es que no lo cambies tú mismo por tratarse de una zona muy sensible y podría causar infecciones indeseadas.

Periodos de curación en los piercings de pezón

Las perforaciones en pezones requieren de un periodo de cicatrización de 6 a 8 semanas como mínimo. Dependiendo de tu nivel de actividad, los pezones pueden requerir más tiempo para sanar, ya sea por el infortunio de un golpe accidental en la zona o el roce con la ropa durante la actividad diaria.

Las mujeres con `pechos grandes pueden experimentar un período de curación más largo ya que estos son más propensos a experimentar choques o fricción durante la actividad normal. Los hombres y las mujeres con senos más pequeños pueden encontrar que tienen un tiempo de curación mucho más rápido. Así es la naturaleza.

Consejos para cuidar tu piercing

  • No toques la zona del piercing con las manos sucias.
  • Evita ropa ceñida que haga presión o roce el área del piercing. Aunque en piercings genitales o en perforaciones en los pezones conviene usar siempre ropa interior, porque ayuda a protegerlos.
  • Limpia la zona al menos una vez al día. Desde que te hagas el piercing hasta su completa cicatrización.
  • La limpieza debe ser suave, eliminando sangre o residuos acumulados en el orificio. Basta usar agua tibia y jabón neutro (tipo el de glicerina), pero puedes ayudarte de una gasa o un bastoncillo que NO sea de algodón (deja hebras).
  • Mueve despacio la joya o el adorno para realizar la limpieza, deslizándolo con suavidad. No te olvides de eliminar bien el jabón con agua tibia o suero fisiológico después de quitar los residuos.
  • Es muy importante secar todo bien con una toalla limpia o una servilleta de papel absorbente. Eso previene la aparición de infecciones debidas a la humedad.
  • Conviene usar una solución antiséptica a base de polividona yodada durante el tiempo de cicatrización.
  • Si estás embarazada y tienes piercings en los pezones, lee este artículo sobre piercings y lactancia.

Cualquier duda que pueda aclararte, no dudes en enviármela a tatuajes@aboutguide.com para poder ayudarte.